Catrin Welz-Stein nació en Weinheim, Alemania. Estudió diseño gráfico en Darmstadt y luego trabajó para varias agencias de publicidad en Alemania, los Estados Unidos y Suiza. Tras el nacimiento de sus hijos, decidió hacer una pausa en su carrera profesional para dedicarse a su familia. Durante este tiempo redescubrió su amor por la ilustración, inspirada en los libros infantiles y cuentos de hadas que leía a sus hijos.
En 2009, Welz-Stein comenzó a crear imágenes digitales, recopilando pinturas históricas, fotografías e ilustracionesque combinaba en composiciones surrealistas y poéticas. Utiliza técnicas digitales para eliminar, agregar y reorganizar elementos, desdibujando los límites entre la fantasía y la realidad. Sus obras se caracterizan por un estilo soñador, a menudo mágico, que transporta al espectador a otro mundo. Welz-Stein se inspira en diferentes corrientes artísticas, como el Art Nouveau, el surrealismo y el folclore.