John Constable, nacido el 11 de junio de 1776, fue un destacado pintor del período romántico. Célebre por sus estudios del cielo y las nubes, sus obras también incluyen caballos, retratos y naturalezas muertas, todas caracterizadas por una precisión y atención al detalle únicas. Hijo de un molinero y criado en el campo, su infancia inmersa en la naturaleza influyó profundamente en su arte.
Constable comenzó sus estudios en Lavenham y Dedham, donde creó muchas de sus primeras obras. Posteriormente, se trasladó a Londres para profundizar sus conocimientos, estudiando a los viejos maestros y perfeccionando la técnica de la copia. En 1806, realizó más de cien bocetos, predominantemente de sujetos femeninos, utilizando lápiz, tinta y acuarela.
Considerado, junto a William Turner, uno de los principales representantes del arte paisajístico inglés, Constable sigue siendo admirado hoy en día por la belleza inigualable de sus obras. Aunque no fue ampliamente apreciado en su tiempo, su trabajo continúa influyendo e inspirando. John Constable murió el 31 de marzo de 1837, dejando un legado artístico que trasciende los siglos.
